Salmorejo con Anchodina, Esferas de Tomate y Hierbabuena
Aprovecha la temporada de tomates para preparar este delicioso salmorejo con sardinas, esferas de tomate y hierbabuena. Este entrante es refrescante, sabroso y nutritivo, perfecto para cualquier ocasión, ya sea una comida cotidiana o una celebración especial.
A medida que el verano llega a su fin, los platos frescos como ensaladas y sopas frías siguen siendo un deleite. Si bien es posible que ya hayas disfrutado de gazpachos y salmorejos en múltiples ocasiones, esta variante aportará un toque innovador que tus comensales adorarán. A continuación, te presentamos una receta fácil y deliciosa que te inspirará a sorprender a tus invitados.
En esta ocasión usamos Anchodina, aunque también puedes optar por sardinas ahumadas. Las esferas de tomate y guindilla añaden un elemento estético y un estallido de sabor; si no las encuentras, puedes sustituirlas por otras de tu elección, como esferas de vinagre de Módena o de aceite de oliva virgen extra.
Tiempo de preparación: 30 minutos
(Para 4 comensales).
Para el salmorejo:
1 kg de tomates carnosos y maduros.
1 diente de ajo grande.
150 g de pan del día anterior.
40 g de aceite de oliva virgen extra.
Un chorrito de vinagre de Jerez.
10 g de sal.
Para la guarnición:
4 filetes de Anchodina o sardinas ahumadas.
4 puñaditos de picatostes a las finas hierbas.
4 cucharadas de esferas de tomate y guindilla.
Cantidad necesaria de hierbabuena fresca.
Preparación del salmorejo:
1. Lava bien los tomates y córtalos en trozos. Coloca los tomates en el vaso del robot de cocina o de una batidora potente. Si utilizas un modelo como Thermomix, no es necesario pelar los tomates ni colar el salmorejo después.
2. Agrega el diente de ajo pelado y troceado, el pan del día anterior también troceado, el aceite de oliva virgen extra, el vinagre y la sal.
3. Tritura la mezcla hasta obtener un salmorejo fino y emulsionado. Si usas Thermomix, puedes iniciar a velocidad progresiva 3-7-9 y luego mantener a máxima potencia durante tres a cinco minutos. Esto garantizará una textura muy suave.
4. Una vez que el salmorejo esté listo, refrigéralo en un recipiente tapado para que se sirva bien frío.
Preparación de la guarnición:
1. Corta los filetes de sardinas en trozos del tamaño que prefieras para repartir sobre la sopa fría.
2. Para los picatostes, puedes hacerlos en casa: corta el pan en cubitos, espolvoréale hierbas aromáticas y rocía un poco de aceite de oliva virgen extra. Extiende los cubitos en una bandeja de horno y hornearlos a 175 °C hasta que estén dorados y crujientes.
3. Prepara las esferas de tomate y guindilla, escurriéndolas del líquido de conservación. Para facilitar esta tarea, utiliza una cuchara perforada o una cucharilla normal.
Acabado y Presentación:
Sirve el salmorejo en cuencos o platos hondos. Añade los picatostes, los trozos de sardina, las esferas de tomate y unas hojas de hierbabuena fresca (picadas si son grandes). Si lo deseas, culmina con un hilo de aceite de oliva virgen extra.
¡Buen provecho! Esta receta es una celebración de sabores frescos y vibrantes que dejará a todos tus comensales satisfechos y encantados.